Discapacitados, Síndrome de Down

La mayoría de las personas con discapacidades pueden beneficiarse de la práctica de ejercicio físico, que se debe adaptar a las circunstancias personales de cada individuo. En esta red, se trabajará especialmente con una población afecta de Síndrome de Down (SD), en la cual no se conoce en profundidad el beneficio que se puede obtener a través de la práctica de ejercicio físico, deduciéndose en la mayor parte de las ocasiones de los beneficios que se pueden encontrar en la población general.

Debido a la especial anatomía de las personas con SD, el trabajo respiratorio suele ser deficiente. La práctica deportiva mejora la capacidad respiratoria y otras variables ventilatorias, por tanto estas personas podrían mejorar el trabajo respiratorio.

Después de un programa de entrenamiento general, la condición física mejora y en concreto, los niveles de fuerza aumentan. Esto podría resultar muy beneficioso para la calidad de vida de los afectados por el SD, e incluso favorecer su inserción y rendimiento en el mundo laboral. De todas formas, al igual que en población general, la práctica de actividad física podría ayudar a retrasar la aparición de osteoporosis, así como minimizar los efectos de la artrosis. Otro beneficio que se busca al realizar un aumento del trabajo muscular es reforzar las articulaciones, mejorar la postura del individuo y evitar la hipermovilidad articular, frenando la hipotonía muscular propia del SD. Además, si tenemos en cuenta la respuesta del organismo frente al metabolismo lipídico en la población general, se deduce que la práctica de ejercicio físico produce una mejora de este metabolismo y ayuda a controlar el sobrepeso, siendo beneficioso también en caso de diabetes y de hiperuricemia.

Sin duda, educar mediante la actividad física proporciona beneficios para la salud. Pero también se han descrito efectos positivos en el aspecto psicosocial. Desde el punto de vista psicológico, los efectos del ejercicio físico en la mejora del concepto de sí mismos y en las conductas asociadas a la inteligencia en las personas con discapacidad psíquica y SD son esperanzadores. Cabe destacar los importantes efectos en cuanto a la autoestima, la sociabilidad y la adaptación al mundo laboral. También es evidente un desarrollo de procesos cognitivos a partir y a través de la práctica deportiva.

  1. RECOMENDACIONES
    1. Introducción 
    2. Prescripción de ejercicio físico en población con Síndrome de Down 
    3. Factores a tener en cuenta a la hora de afrontar un programa de actividad física para personas con Síndrome de Down.
  2. RESULTADOS  Y BIBLIOGRAFÍA 
  1. PROCEDIMIENTOS
    1. Adaptación al entorno de trabajo y evaluación
    2. Reconocimiento Médico-Deportivo
      1. Historia Médico-Deportiva 
        • Consentimiento informado (ANEXO)
      2. Exploración Por Aparatos
      3. Pruebas Funcionales:
        • Cineantropometría y composición corporal 
          (ANEXO) 
        • Valoración de la fuerza 
          • Fuerza isométrica
          • Fuerza explosiva
        • Prueba de esfuerzo
    3. Evaluación Deportiva-Motora Inicial
      1. Temporalización
      2. Metodología
      3. Adaptación de la Batería Eurofit